El Cardispan, cuyo componente es la Levocarnitina, es un medicamento que generalmente lo utilizan para perder peso, de la misma forma que lo pueden indicar para diferentes padecimientos como diabetes, quemaduras, hipertiroidismo, insuficiencia renal tratada con diálisis, cirugías, niños que están en bajo peso, entre otras cosas.
El Cardispan también puede ser indicado para niños, todo dependerá de las circunstancias, ya que hay situaciones en las que un niño pequeño tendría que consumir Cardispan si presenta alguna situación que lo requiera.
Es posible que el médico le prescriba Cardispan pediátrico a un niño por diversas razones, y la causa para indicarla solo debe de ser establecida por el médico pediatra. Es por este motivo, que debes de estar pendiente de las contraindicaciones de este componente.
Cuando el medico indica este medicamento a un niño, mayormente lo indica en solución oral al 30% para tratar enfermedades vascular periférica, isquemia miocardiopatía crónica, niños desnutridos, neonatos, niños de bajo peso al nacer, prematuros, etc.
Contraindicaciones – Cardispan pediátrico
Según el prospecto de este medicamento, únicamente la contraindicación que tendría seria que estuviese hipersensibilidad a la levocarnitina.
En conclusión, el Cardispan puede ser consumido por niños pequeños, en especial cuando tiene problemas por mala alimentación.
También, la indicación estaría implantada por el medico dependiendo el problema de salud que tenga el niño.
La solución ideal para un niño debe ser la presentación que viene al 10 % con el frasco de 120 ml. Cada 5 ml tiene 50 mg de levocarnitina.
Aunque este componente puede ser indicado para diferentes dolencias, en los niños mayormente lo indican si hay desnutrición y si existe algún déficit de levocarnitina.
Dosis y vía de administración – Cardispan pediátrico
Este medicamento se utiliza por vía oral.
En niños que tengan deficiencias primarias de levocarnitina debe emplearse 100 mg por día.
En conclusión, este medicamento no solo se utiliza para perder peso, puede indicarse en niños e incluso en bebes.
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No deberías administrar productos como Cardispan a tus hijos sin la supervisión adecuada de un médico. No todos los tratamientos funcionan igual en cada cuerpo y es importante considerar los posibles efectos secundarios. La salud de tus hijos merece la máxima precaución y cuidado.